El sol arruinó ciertamente el 2-0

ENTREVISTAS Según Ovidio, las alas de Ícaro se derritieron al volar demasiado cerca del sol. Coosemans cometió un torpe error contra Westerlo al mirar al sol por un momento, aunque al final el error del portero no fue decisivo. Al igual que Ícaro, al portero se le advirtió del potencial peligro.

Un hecho insignificante que después resultó ser valioso sucedió antes de que el partido iniciara. Westerlo ganó el volado, pero decidió cambiar de lado. Su portero se dio cuenta durante el calentamiento de que el sol podía ocasionarle problemas y así sucedió en el minuto 22 cuando Coosemans, torpe y repentinamente, falló con un balón que estaba al alcance de su mano.

Coosemans, que esta temporada ya ha salvado a Anderlecht de perder puntos, admitió después frente a la cámara que el sol fue el aguafiesta en esta fase. El balón de Haspolat aparentemente desapareció por la luz del sol y el portero lo único que vio fue una mancha negra. "Traté de saltar hacia algo, pero tal vez parecía realmente tonto". según Coosemans. Coosemans se dio cuenta de que todo el equipo estaba rindiendo por debajo de sus capacidades e incluso lo básico era insuficiente. "Los principios básicos del fútbol actualmente son deficientes. Si no traes eso, pierdes."

Fuente: Het Laatste Nieuws