FLASHBACK Anderlecht empató 0-0 contra el PSV en la segunda ronda de la última edición de la Copa de Europa I en 1991. El 6 de noviembre 1991, el partido de vuelta en el Astridpark terminó con una victoria de 2-0. Después siguió, como cuartos de final, una fase de grupos.
Anderlecht terminó tercero detrás de Sampdoria de Génova y Estrella Roja de Belgrado (pero por delante del Panathinaikos). Por lo tanto, quedó eliminado.
Continue leyendo abajo del anuncio
Continuar leyendo Pero en esa segunda ronda, Marc Degryse anotó un gol muy bonito. El mediocampista, tras siete minutos, se llevó el balón desde su propio campo y disparó desde larga distancia, bajo, al ángulo lejano: 1-0. Poco antes del final, el rápido Boffin culminó un contraataque bien jugado: 2-0. En esa época, jugadores como Gert Verheyen, Luc Nilis y Luis Oliveira también formaban parte del equipo. Degryse jugaría además un papel importante en la siguiente ronda, cuando junto con Luc Nilis llevó a Anderlecht a superar a Sampdoria de Génova (de 0-2 a 3-2).
Marc Degryse fue el motor de Anderlecht en esa época. Un año antes, Degryse ya había alcanzado la final de la Copa de la UEFA con Anderlecht. El entrenador Aad de Mos había fichado a Degryse desde el Club Brujas hacia Anderlecht en 1989. Pero fue sobre todo bajo Johan Boskamp cuando Degryse se volvió realmente importante. El entrenador neerlandés también nombró capitán a “el pequeño” (como Boskamp lo llamaba). Con la camiseta púrpura jugó 170 partidos y anotó 60 goles. También acumuló 63 apariciones con Bélgica y marcó 23 goles con los Diablos Rojos. En 1995 se fue al Sheffield Wednesday y luego jugó en PSV, Gent y Beerschot.
Danny Boffin comenzó su carrera en el STVV y en 1991 se trasladó a Anderlecht. En ese momento jugaba en el Standard de Lieja y, junto con sus compañeros Jean-François De Sart y Jean-Marie Houben, logró un traspaso al club récord de campeonatos, donde jugaría hasta 1997. Disputó 187 partidos y anotó 30 goles. Boffin jugaba tanto en la banda izquierda como en la derecha y era famoso por su velocidad. A menudo lo llamaban “la moto”. Boffin fue importante para Anderlecht y, por ejemplo, anotó dos goles en la Liga de Campeones contra el Werder Bremen, aunque Anderlecht dejó escapar un 0-3 (el partido terminó 5-3).